Estella, Lizarra, Estella-Lizarra, tres nombres para una misma ciudad que lo es desde inicios del siglo XI, si bien el antiguo poblado que se situaba aquí data de muchos años atrás. Sus nombres son reflejo de lo que hoy en día es: una ciudad plural. Sus calles han conocido el paso de vascones, francos, judíos y otros pueblos y culturas, navarras y navarros que han dejado su huella para dar a Estella-Lizarra su identidad actual, llena de matices y heredera de un rico patrimonio.

Cada época ha aportado a la historia de la ciudad sus peculiaridades y vestigios, y sus pobladores, ya fueran vascones, francos o judíos, también lo hicieron. La vieja Lizarra ha transitado su camino orgullosa y amable, siempre unida al río Ega, referente del Camino de Santiago, que atrae anualmente a nuestra localidad a miles de personas peregrinas.

Podríamos decir por lo tanto que Estella es la ciudad de las historias: os invito a conocer algo más sobre sus tres castillos medievales, sus numerosos templos, sus palacios, sus plazas y rincones, los ecos de su judería... Todos ellos os contarán cosas que os ayudarán a comprender la hermosura e importancia de esta ciudad de la que tengo el honor de ser alcalde.

Además de por su espectacular patrimonio cultural, Estella-Lizarra puede estar orgullosa de tener un tejido asociativo que es envidia de muchas localidades. Estos colectivos y asociaciones hacen de Estella-Lizarra una ciudad llena de vida durante todo el año, pero es especialmente en las fechas festivas cuando adquieren un protagonismo capital, ya que, sin estos colectivos, sus carnavales, las navidades, la semana medieval, sus fiestas grandes y pequeñas, no serían lo que son. Os invito a disfrutar de cualquiera de ellas; estoy seguro de que repetiréis.

Sin lugar a dudas, desde sus orígenes jacobeos, uno de los sectores económicos clave de la ciudad es el comercio. Hoy, ya entrado el siglo XXI, la ciudad continúa siendo el referente de la merindad en cuanto a las compras, con una oferta variada y moderna y un mercado semanal de gran tradición y estimulantes retos de futuro. Por otro lado, en cuanto a su desarrollo económico, Estella-Lizarra aspira a situarse también a la cabeza de la merindad en otros sectores como el industrial —con la dinamización de su polígono—, y el turístico, sector este último en el que, en estrecha colaboración con el resto de poblaciones y las entidades dedicadas a su promoción, queda un fructífero camino que recorrer.

Además, Estella-Lizarra, como cabeza de merindad, es centro de servicios para toda la comarca, con instituciones como el Hospital García Orcoyen, el Colegio Público Remontival, la Escuela Infantil Arieta, el Instituto Tierra Estella, la Escuela de Música Julian Romano, el Almudí o la Biblioteca Miguel de Eguía, todos ellos referencia de nuestras vecinos y vecinas de la merindad.

En definitiva, Estella-Lizarra cuenta con una amplia oferta cultural y deportiva como así demuestran los más de veinticinco clubes deportivos y colectivos culturales; su tejido comercial de altura gracias a los más de noventa comercios existentes; una oferta hostelera de calidad comprobable en cualquiera de los cuarenta establecimientos de la ciudad; unos variados servicios... Sin embargo, de lo que más orgulloso me siento como Alcalde es del impresionante valor humano de su ciudadanía, que es la que hace posible todo esto; sin duda, el conjunto de sus vecinas y vecinos es lo más preciado de nuestra ciudad, y por eso trabajo duro cada día para, con su indispensable ayuda, intentar mejorar la ciudad en que vivimos, Lizarra, Estella, Estella-Lizarra.